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"Todo Albéniz por Aldo Rodríguez "
Pedro de la Hoz
La maestría artística de Aldo Rodríguez, forjada a base de estudio
y tenacidad, y ampliamente reconocida a escala internacional, es uno de
los puntales que sustenta, a la altura de los 90, la solidez de la escuela
cubana de guitarra. A un guitarrista de su estirpe le faltaba pasar por
una prueba de fuego, la interpretación íntegra de la Suite española
de Issac Albéniz, y esa fue la tarea que se propuso Rodríguez el último
fin de semana, en un recital ofrecido en la sala Argeliers León, de esta
capital. La Suite española presenta dificultades técnicas y expresivas
considerables. No sólo es una especie de himno del espíritu romántico-renacentista
de ese país, sino implica un esfuerzo físico enorme, un despliegue de
habilidad supremo, y mucho más, una variedad discursiva tremendamente
unitaria. Por si fuera poco, el pueblo cubano ha tenido acceso a memorables
versiones, como la de John Williams y Narciso Yépez, por citar dos casos.
Sin acudira a la comparación, la Suite española, en los dedos y
el corazón de Rodríguez, encontró algo más que fidelidad interpretativa:
nuestro guitarrista la ha hecho entrañable a su perfil, fluida, grácil,
generosa, lista para hacerla pasear con dignidad dentro y fuera de la
Isla.
Tomado de "Granma"
del 1 de marzo de 1994
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